martes, 31 de diciembre de 2013

Bienvenido 2014 :D

No planeo como todos los años hacer un resumen en orden cronológico de mi año, ya revise eso durante la mañana conmigo misma.

He aquí las conclusiones obtenidas

-Mi relación de pareja está cada vez mejor, me siento total y completamente enamorada de él, quiero que continuemos creciendo juntos, y apoyarnos mutuamente como lo hemos hecho este año.
-Me enamoro cada día más de Medicina, me encanta hablar con los pacientes, intentar ayudarnos, conocer sus historias… Y quiero de lo mismo ser docente en un futuro.
-Mis amigos, se agregaron algunas personitas a este círculo, así como algunas se fueron,  hice aún más firme el lazo con otros. Pero sin duda fueron un gran apoyo este año, NO me sentí sola, tuve siempre claro que ellos estaban ahí.
-Me di cuenta que priorice la universidad y le reste tiempo a “mi vida”,  por lo que en este 2014 que comienza en unas horas planeo darme tiempo para mí y lo que me gusta, deporte y ayudar; y por más carga académica que exista no dejarme de lado.

-Quiero Cumplirle a Don Miguel,  en ese compromiso que sin el saberlo hice con el.
-Este fue un excelente año!!!

Con todas las energías para empezar este 2014 de la mejor forma!

martes, 24 de diciembre de 2013

Una Atea que ama la Navidad

     Para nadie es un secreto que no creo en la existencia de un Dios, pero a diferencia de muchos "ateos" sí celebro  "Navidad".
     Para el mundo cristiano en esta fecha se celebra el Nacimiento de su profeta, Jesús, (pese a que todo apunta que no fue en Diciembre sino en Octubre, pero que más da) y en honor a esto se acostumbra a esperar en Familia la llegada de las 0 hrs para entregar regalos a sus seres queridos; o por lo menos ese era su significado. Claramente este se ha ido perdiendo con el pasar el tiempo, adquiriendo mayor importancia "Los regalos", y es así como llegamos a la palabra de moda "consumismo"
      No niego la existencia de Don Consumismo ni niego que la gran mayoría celebra esta fecha sin sentido; pero tampoco puedo negar que hoy y mañana es libre laboral, y la gente sea por la razón que sea, se reúne con su familia, cenan juntos y luego al entregarse los regalos se abrazan, sonríen, besan...  y para que decir los niños, es su fecha, los papas 100% pendientes de ellos, comparten con otros niños, abren los regalos con emoción; Y algo importantisimo, las personas que viven en alguna situación adversa: situación de calle, hogares, hospitalizados, bajos recursos..., el mundo parece recordar que existen y van a verlos, acompañarlos, llevan comida, juguetes, amor, esperanza. 
      Lo ideal sería que la gente incluyera lo anterior en su forma de vivir, pero ya que no nuestro mundo esta cada vez peor, el que esto ocurra a lo menos un día, es inmensamente hermoso para mi; ver a los padres compartiendo con sus hijos, niños felices, personas en situación de calle sonriendo, enfermos olvidando que lo están. 

 "Quizás no sea por la razón correcta, pero si lo correcto"

domingo, 2 de junio de 2013

Un padre con Cáncer de hígado




    Estábamos en esa sala blanca de 3x3 los 7, junto a él, El Doctor, cuando se abrió la puerta, que era lo único que destacaba de aquella sala, puerta azul, totalmente ajena al resto del mundo ahí, blanco y frío, y vislumbro desde al  lado de la camilla a una joven, delgada, tes clara, cabello rubio con raíces castañas, nerviosa, inestable, linda y  de paso lento, y tras ella un señor, con mirada al suelo, chaqueta gris, cabello canoso, fiel reflejo de su experiencia. Él al mirarlos dentro de la sala les dice "tomen asiento", y luego dirige su mirada a la tan importante ficha clínica, ignorando por completo la cara de aquellas dos personas que hasta ese momento nos eran ajenas, que reflejaban tanto y a la vez nada. Y dice: Examinen el abdomen del señor, mirándonos, para luego desviar su mirada a la muchacha.
     El señor estaba en la camilla acostado, cuando uno a uno le realizamos el rutinario examen con aquel doctor, gastroenterólogo, examen abdominal, siendo llamativo lo papable y tenso del hígado; pero a mi no me llamaba mayormente la atención ese hígado, sino el doctor, quien hablaba susurrando con la joven, quien era la hija de aquel hombre recostado, silencioso y con mirada perdida en el frío techo; algo pasaba, probablemente su diagnostico era de mal pronostico, o quizás el tenía miedo, o algún problema que no pudiésemos saber nosotros, simples alumnos de medicina, quizás había discutido antes de entrar a la consulta con su hija, quizás no le agradaba el medico, quizás simplemente estaba agotado… Cuando una pregunta del doctor interrumpe mis infinitos pensamientos:
-¿Qué encontrarón?
- Un hígado duro, y de bordes claros.

    ¡Un Hígado! Como si pudiese existir un hígado sin una persona que lo posea, como si ese señor no estuviese ahí acostado frente a nosotros, y tuviésemos sólo un hígado, un hígado con bordes claros y de consistencia dura… No un hombre con una preocupación, y posiblemente tristeza en su interior, sino simplemente un hígado.

 -Muy bien, ¿Y qué patología nos puede producir un hígado con estas características?

-Cirrosis, responde uno de nosotros con inseguridad, esperando la aprobación del doctor

 -¿Y qué más?

 Todos nos miramos, evitando abrir la boca para responder, hasta que un compañero alza la voz y dice:
-Un carcinoma doctor

 -Así es, este señor tiene un Cáncer de hígado


No variando su tono en ningún momento mientras hablo; tenía a un hombre frente a él con un cáncer, siendo probablemente una temática importantísima en la vida del señor, pero en su rostro se veía emoción, probablemente porque le alegraba que nosotros como alumnos pudiésemos ver este tipo de cáncer.

 - Este señor tiene múltiples nódulos en el hígado…

 Mi mente bloqueo las palabras del doctor automáticamente. Como era posible que hablara como si nada de lo terrible que era este cáncer para finalizar diciendo "a lo más un año de vida…" Como era posible que el doctor en ningún momento hubiese tratado al señor por su nombre, o disimulado la emoción que le causaba este tipo de patología… Como era posible que siquiera mirara a aquel señor, y como era posible que no pudiese controlar mis lágrimas frente a esta situación, no pude, 2 de ellas lograron vencerme, cuando una de mis compañeras me apretaba fuerte la mano, y un compañero me abrazó, seque mis lágrimas, y me agrado ver que el señor no me había visto. Luego me dedique únicamente al ver el rostro de aquel señor, a quien le acababan de decir que su situación era terminal, y que próximamente iniciaría con dolores para a más tardar en un año morir… No lloro, asintió, y fue en ese momento en que su mirada me permitió entenderlo, a él si le afectaba y mucho, pero estaba su hija ahí y por ella no se mostraría débil ni asustado, sin saber que su hija por la misma razón no lo hacía.